¿Vuelve la Guerra de Divisas? Lo cierto es que, en las ultimas semanas, se ha visto como uno de los principales jugadores economicos mundiales ha comenzado a devaluar su divisa. Estamos hablando de la devaluacion del yuan chino, que cayó más en mayo que en cualquier otro mes desde que el gobierno chino comenzó a permitir que el renminbi se apreciara gradualmente en el verano boreal de 2005.
Esta devaluacion del Renminbi o devaluacion del Yuan afecta y mucho al resto del mundo, sobre todo por el tamaño gigantesco de la economía china y por el caracter super exportador de ese país. Esta devaluacion representa un cambio en el mercado de divisas que podría ayudar a las exportaciones chinas pero agrava las fricciones comerciales con Europa y en particular con los Estados Unidos. La cotizacion del Yuan ha bajado cerca del 1% el ultimo mes.
Al establecer cotizaciones cada vez más débiles para el yuan respecto del dólar al comienzo de las operaciones de cada día, el banco central chino ha hecho bajar el renminbi respecto del dólar 0,9% en el último mes. La baja en las cotizaciones diarias coincide con señales de que la economía doméstica china está desacelerándose marcadamente esta primavera y puede necesitar la ayuda de mayores exportaciones.
Una divisa más barata hace más competitivas las exportaciones chinas en los mercados extranjeros, pero los productos extranjeros se vuelven más costosos y menos accesibles en China. Pero esto no es nuevo. El Gobierno estadounidense ha estado presionando a China en los últimos tres años para permitir una apreciación más acelerada del renminbi, no su depreciación, como un modo de reducir el déficit comercial de Estados Unidos con China, que alcanzó el récord de US$ 295.460 millones el año pasado.
El departamento del Tesoro de los Estados Unidos difundió un informe recientemente en el que critica el manejo del tipo de cambio de China y reclama por primera vez que el país dé a conocer datos sobre la escala de sus intervenciones en el mercado de divisas. Pero el informe no llega a calificar a China de manipulador de su divisa, calificación que los líderes chinos han indicado que les molestaría mucho y se opondrían a ella.
