Recientemente se puede observar un ligero avance de la moneda europea sobre la divisa estadounidense (0.5%), pudiéndose obtener a 1.288 Dólares.
Dicho avance se debe a dos circunstancias por un lado los buenos resultados obtenidos en las últimas subastas de bonos en España y Francia y por otro la publicación de los datos de empleo en los Estados Unidos, donde si bien el incremento de empleos, fundamentalmente en el sector de servicios, creció a un ritmo mas moderado de lo esperado, no fue un impedimento para que los inversores depositaran su confianza sobre la economía y tomaran mayores riesgos.
Para los analistas, el próximo objetivo del Euro es alcanzar los 1,2873 dólares, un 38,2% de caída desde su máximo de agosto de 1,3334 dólares y su mínimo de 1,2588 dólares.
Con respecto a otras monedas el Euro avanza el 0,7% frente al yen y el 0,6% respecto al franco suizo.
Sin embargo estos datos inquietan, ya que ponen en evidencia que la recuperación de la economía de Estados Unidos y su moneda no será un proceso facil y sencillo como se esperaba y mucho menos espontáneo, sino que será un proceso lento, lleno de cambios y transformaciones, en donde se experimentara un proceso de crecimiento moderado, el cual se hará visible en los próximos años.