El euro marca máximos de seis meses frente al dólar al incrementarse las expectativas de que la Reserva Federal tome nuevas medidas de estímulo económico.
Los buenos datos arrojados de ingresos y gastos personales en Estados Unidos en agosto no han servido para contrarrestar la tendencia bajista del billete verde.
De esta manera, el euro supera los 1,37 dólares, y marca su nivel más alto desde mediados de marzo, rompiendo la resistencia fijada en 1,3692, máximo alcanzado en abril.
A esto hay que agregar la participación de los Bancos asiáticos, que han estado comprando dólares en vez de la moneda local, para posteriormente comprar dólares con ellos para reequilibrar sus reservas.
El euro rompe así sus medias móviles de 55 y 100 semanas, fijadas en 1,3612 y 1,3572 dólares, lo que, según los analistas técnicos abre la puerta a nuevas ganancias.
